martes, 23 de octubre de 2007

Nikita Michalkov y su visión de Mongolia

El camello blanco, El perro mongol son películas de indudable valor antropológico. Sin embargo, la película sobre Mongolia es, sin duda, Urga, de Michalkov. Tiene de interés el choque, aún visible, entre la ocupación soviética y la Mongolia que nunca se convirtió ni sometió. La cara que pone el nómada mongol al ver al ruso, de absoluta perplejidad, es más fiel a lo que en realidad es Mongolia, que el mundo asordinado que se suele ver en las películas o documentales sobre aquel país. Quizá sólo la nostalgia sea la mirada "autorizada" sobre esta tierra extrema. Quién sabe. A mí me gusta pensar que una mirada nueva es posible. Y por eso me fui para allá.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Hice un Máster de antropología sobre Mongolia y la China interior. No recuerdo que quedaran takhis en aquellas latitudes. ¿Dónde puedeo conseguirlo?

Carlos Jiménez Arribas dijo...

Hola, Feli: gracias por tu comentario. Hay una profesora de EEUU que ha escrito varios trabajos sobre Mongolia, pero no recuerdo su nombre. Te lo puedo mirar con más tpo. El Viaje al ojo de un caballo que creo que estará en las librerías. Si no, avísame. Abrazos y nuevas gracias.

Carlos Jiménez Arribas dijo...

Feli, el libro del que hablaba ayer es de Sablofff (Paula): Modern Mongolia: Reclaiming Genghis Khan. Ella es la editoria y hay artículos de diversa gente. Te puede interesar.

Anónimo dijo...

A mí me interesa éste, el tuyo, y he visto que también se puede comprar en la propia editorial, Artemisa. Yo acabo de hacer el pedido, por si a Feli le interesa: http://www.artemisaediciones.com/libro.asp?id=89. Hay que hacer click en "cesta" y te lo mandan contra reembolso. Ya les diré lo que me pareció cuando lo lea.

Anónimo dijo...

Había leído algunos poemas de Carlos Jiménez Arribas que me gustaron pero este libro me parece aún más delicioso. Vamos, que siento ganas de salir corriendo hacia Mongolia y no sólo para admirar a los takhi sino también para conocer a aquella gente tan enigmática. Gracias Carlos por tu libro, mucho más ilustrativo que cualquier gran documental para conocer aquellas tierras.

Carlos Jiménez Arribas dijo...

Gracias, Juan Pedro. Dicen que en la nueva película-documental Tierra salen unas garzas mongolas cruzando el Himalaya en su migración anual. No te lo pierdas, hay cosas que es necesario verlas con los ojos, los escritores al fin y al cabo sólo nos acercamos.

Anónimo dijo...

Bueno, dicen que los caballos mongoles la tienen como los negros, ¿es esto cierto? ¿Hablas de ello e el libro? Lo digo porque alguien dijo una vez que los caballos españoles son altos pero la tienen pequeña... (jeje)

A principios de julio de 2006 salí de Madrid rumbo a Mongolia. Iba a pasar tres semanas observando al último caballo salvaje del planeta (Equus Przewalski Poliakov, takhi para los mongoles), reintroducido con éxito en el Parque Nacional de Hustai, a unos cien kilómetros al suroeste de Ulan Bator. Llevaba en la mochila tres libros. El primero, El arco y la lira, de Octavio Paz. El segundo, la obra ensayística de R. W. Emerson. El tercero, escrito en un cuaderno con tapas de damasquino aún sin estrenar, comprado el verano anterior en Capadocia —literalmente, «la tierra de los caballos bonitos»—, acabó siendo este libro. [CJA]